lunes, 29 de abril de 2013

MÚSICA: Arabia Mountain (2011)


Conocí a Black Lips en la difunta cadena Fly Music, cuando presentaban "Oh Katrina". Desde entonces tampoco es que les haya seguido la pista en exceso, pero de vez en cuando siempre terminaba volviendo a ellos. Son potentes y guarros, y tienen una colección de temazos importante.

Hará dos meses fue tuve una de mis regresiones hacia ellos, me acordé que existían y decidí buscar algo nuevo. Lo que encontré no es exactamente nuevo (es de hace ya dos años) pero posiblemente sea lo mejor que he escuchado de los de Atlanta; Arabia Mountain.

Arabia Mountain es el sexto trabajo de estudio del grupo, y, si me preguntáis, es el más accesible de todos. Hasta Arabia Mountain se pasaban (sobre todo sus primeros discos) de garajeros, punkis y ruidosos, a no ser que estuvieseis en el rollo es muy poco probable que consiguieseis pasar por uno de ellos entero. No son malos discos, pero son demasiado sucios. Este sexto trabajo no. Este sexto trabajo parece producido, parece cuidado y parece trabajado. No suena cómo si lo hubiesen grabado una tarde de borrachera ni nada.

Supongo que algo de eso tuvo que ver con que lo produzca un tío cómo Mark Ronson, que tiene una concepción bastante buena (creo) de la música comercial (buscad si no en YouTube "Mark Ronson Bang Bang Bang" es un temazo de cojones), o, mejor dicho, de la música soportable y para un público más abierto. Porque Arabia Mountain no es comercial, es accesible, que es diferente. Evidentemente si no te gusta el garage, el punk o el surf vas a odiar este disco, si eres un purista de la higiene y solo disfrutas si los músicos clavan las canciones o el cantante canta... odiarás este disco, pero eso no hace que "Modern Art", "Bicentennial Man" o "Raw Meat" dejen de ser temas accesibles y disfrutables para todo el mundo (es muy probable que los temas más "para todos los públicos" de la banda estén en este disco).

En general me apetecía hablar de Black Lips porque creo que es uno de los mejores grupos de los últimos años, son duros, lo que me parece genial, y sus canciones son potentes, y si tienen un disco que os ayude a acercaros a unos músicos que merecen mucho y me da la sensación que no se les da suficiente bombo.

Música genial para empezar la semana.

sábado, 27 de abril de 2013

CINE: Iron Man 3 (2013)


Vale, vamos al lío. Ayer comenté que Iron Man 3 tenía que conseguir ciertas cosas. Vivimos en el mundo (nosotros y los personajes de la película) post-Fase1. Después de Los Vengadores las cosas han cambiado y ya no podemos esperar las mismas cosas de Marvel, ahora nosotros, cómo expectadores, estamos en posición de exigirles más (que interés tendría si no) y ellos en la necesidad de darnos más. Y sabiendo eso ayer decidí ir a ver la primera película de la Fase 2.

Y... ¡Joder! ¡Qué buena!

Es la mejor de las tres, con diferencia, y me atrevería a decir que es la mejor de Marvel (con permiso de Los Vengadores) hasta la fecha. Es divertida, graciosa y lo suficientemente única y distanciada del resto. A estas alturas ya están todas las cartas sobre la mesa, y no hace falta utilizar personajes de fuera para entender eso. Las referencias a las otras películas son constantes (hablan mucho de Thor y la invasión alienígena) y la película hace hincapié (sobre todo en la primera parte) de marcarse como secuela directa de Los Vengadores, pero ahí acaba todo en el plan de Marvel. No aparece Shield, ni el capi, ni thor, ni nadie (salvo en el post-créditos) y esa idea la cinta la agradece mucho, porque se centra en lo que se tiene que centrar, se centra en el viaje de Tony Stark para probarse a sí mismo cómo merecedor del título de hombre de hierro.

Es gracioso que después de todas las armaduras que han ido saliendo durante la promoción de la película en la cinta el protagonista pase tres cuartos vestido de paisano. Y es todavía más gracioso si tenemos en cuenta que esta es, con diferencia, la película del personaje que más acción tiene. Hay tres escenas gordas (dos de ellas ya mostradas en los trailers y una tercera que simplemente es LA PUTÍSIMA POLLA) y otro montón de pequeños momentos de acción, en muchos de los cuales Tony no lleva puesta la armadura. Y funciona.

El malo es, por fin, un gran villano y el clímax, es, por fin, un gran clímax. La historia funciona mejor que en las anteriores, quizás sea un poco demasiado dispersa porque sugiere muchas cosas sin terminar de hacer verdadero hincapié en algunas, pero no es un problema como podía serlo en la segunda parte (en donde la historia avanza como un pollo sin cabeza) si no que son pequeños detalles que se sugieren (o se plantean abiertamente) y luego no se vuelven a comentar o no se terminan de resolver del todo. Pero a pesar de todo el guión es buenísimo, es un parto y tiene un par de giros bastante chulos. Probablemente sea la mejor secuela de una película de superhéroes hasta la fecha. Coge lo que ya estaba establecido y le da una vuelta de tuerca y un tono que combina el thriller pseudo-político con las películas de James Bond y las películas de Superhéroes.

Hay un par de cosas que van a enfadar a los fans aún así. Temas que a mi personalmente me parecen aciertos y triunfos pero que entiendo que muchos no vayan a pensar así, yo no soy tampoco un fan del personaje. Aparte se han pasado por el forro un poco la historia de Extremis, han conservado lo que les ha dado la gana y luego han hecho todo lo de más, y funciona muy bien y eso, pero también funcionaba la historia original, así que supongo que dependerá de gustos... o algo. A mi me gustó (y me sorprendió que fuesen tan asaco con el Extremis, esperaba que hiciesen otra cosa).

En general ayer fui al cine acojonado perdido, temiéndome lo peor, y salí encantado de la vida, sorprendido y con ganas de más. Exactamente como debía salir. Es el mejor cierre que podían haber dado a la trilogía.

Si esto sigue así, esta segunda fase va a ser la polla.

jueves, 25 de abril de 2013

CINE: La importancia del hombre de hierro

En 2008 Marvel decidió tomar las riendas de sus adaptaciones (aún sin ser productora) y estrenó Iron Man. La sorpresa, por supuesto, vino al final de los creditos, cuando Samuel L Jackson, en el papel de Nick Furia soltó la bomba. "Vengo a hablarle de la iniciativa Vengadores". Aquello resonó en los oídos de todos los fans de los cómics y fue el pistoletazo de salida para la llamada "Fase 1".

La aparición de Tony Stark en Hulk confirmó lo que todos nos imaginabamos, Marvel iba en serio con trasladar su universo comiquero al cine.

Dos años después de aquello Marvel, ya sí com productora, estrenó Iron Man 2. La secuela no solo fue la primera película de la editorial cómo productora (lo que suponía que supervisarían todo lo que se hiciese con sus personajes -al menos aquellos personajes cuyos derechos todavía conservaban) si no que fue, para desgracia de la propia película, el prologo de lo que terminaría convirtiendose en Los Vengadores. No solo era una declaración de intenciones sobre cómo iban a hacer las cosas si no que suponía el primer atisbo del objetivo final de la compañía.

El año pasado toda esa preparación culminó en el estreno de Los Vengadores. La cinta no solo sobevivió al hype y supuso (a mi modo de ver) la mejor adaptación de lo que supone un cómic a la gran pantalla, si no que terminó convirtiendose en la tercera película más taquillera de la historia.

Y hoy, casi exactamente un año después del estreno del gran cosover de la casa de ideas y cinco años después del estreno de la primera parte, Marvel estrena Iron Man 3, que, entre otras cosas, supone el pistoletazo de salida para lo que se conoce como "Fase 2".

Las apuestas han crecido, claro. Ya no estamos jugando a cumplir las fantasias de todos los nerds del mundo, ahora toca dar un golpe encima de la mesa, ir un paso más allá y estrenar algo que no viva a la sombra de un proyecto mayor (cómo han hecho hasta ahora) si no que toca hacer algo con voz propia y que diga "podemos hacerlo mejor". Iron Man 3 no solo es la primera película de esta segunda fase, si no que debe suponer, cómo las anteriores entregas del vengador dorado supusieron, el modo en el que Marvel va a abordar el problema. Tiene que ser toda una declaración de intenciones, la película que marque el camino que seguirán todas las de más.

¿Qué deberíamos esperar de esta Iron Man 3 entonces? No solo deberíamos esperar un cierre épico de una de las grandes franquicias de los últimos años (o tal vez no un cierre, pero las trilogías son un concepto más redondo) si no que deberíamos esperar una película con voz propia. Las aventuras del hombre de hierro, al igual que las futuras Thor 2 y Capitán América 2, deberían adoptar ahora un sentido por si mismas, un tono determinado. ¿Qué tono? No sé exactamente. En realidad Iron Man ha sido siempre el buque insignia (a nivel cinematográfico) de la editorial así que es la que menos problemas tiene en distanciarse de las de más, pero cuanto más se aleje de la "clásica película de cómics" y más demuestre que Marvel puede hacerlo mejor, más esperaremos las futuras secuelas y los futuros episodios de esta segunda fase.

Si Iron Man 3 fracasa no se caerá todo el proyecto, pero si creo que se verá mermado. Si Iron Man 3 es un chasco nuestras espectativas de ver algo diferente en Thor 2 (que debería ser la fantasía épica que prometen los trailers) y El Capitán América 2 (que debería ser el thriller de espías que parecen prometer) caerían un poco. Esta tercera parte no se puede permitir ser mediocre cómo aquella segunda, porque la maquinaria de la segunda fase (por más que le joda a Thanos) no ha empezado a moverse todavía, arranca hoy, con Tony Stark.

Iron Man 3 debe suponer lo que supuso la primera, debe ser la película que nos haga querer ver las de más.

Veremos si lo consigue.


(la voy a ver hoy así que mañana o pasado -o puede que hoy a última hora incluso- tendréis crítica aquí).




(perdón por las -posibles- faltas de ortografía y la falta de imagenes. Cuando llegue a casa edito).

sábado, 20 de abril de 2013

VIDEOJUEGOS: Apocalypse (1998)


De todas las generaciones de consolas, creo que a la que peor le ha sentado el paso del tiempo ha sido a la de los 32/64 bits. La generación de la PSX y la Nintendo 64 ha envejecido, en general, de pena.

Y es normal también, no lo digo como algo malo, pero cuando estas consolas empezaron a funcionar el tema de los juegos en entornos 3-D no se habían utilizado (salvo excepciones) nunca y en cierto modo esos desarrolladores iban trabajando esquivando las ostias según se encontraban con ellas. Por eso, a pesar de la colección de clásicos que tiene esa generación (el primer Metal Gear Solid, los Zeldas de la N64, el Mario 64 o los Final Fantasy de la PSX) hay montones de mierda sin los que, por otra parte, es muy probable que no tuviésemos los juegos que tenemos ahora.

Uno de esos juegos de mierda olvidados (y en este caso no hay excusa, tampoco es que aporte gran cosa a la historia de los videojuegos, no nos engañemos) es Apocalypse, el segundo juego de Neversoft como desarrolladora.

Apocalypse es un shooter en tercera persona ambientado en el futuro. Es uno de esos juegos que ya no se hacen, ese tipo de juegos arcade en el que la estrategia no importaba una puta mierda y lo más importante era no soltar el gatillo ni 3 segundos. Si hubiese que buscarle unos "padres" a este juego habría que remontarse a los Contra, Turricans o incluso Metal Slugs del mundo. Juegos de esos de miles de enemigos y muchos, muchos disparos. La novedad que aporta el genero al juego a nivel de jugabilidad es doble, pero tampoco es algo que nunca se hubiese visto. La primera es la forma de jugar, el juego divide el mando en dos crucetas, una sirve para moverse (la cruceta -o el joystick- normal) y la otra para disparar (los cuatro botones del mando de la PSX). Si quiere disparar a un lado debe elegir el botón de la cruceta de disparo que apunta a ese lado. Más o menos este sistema funciona bien, hay un par de momentos en los que puede que te encuentres disparando a la pantalla si ser capaz de ver lo que estás matando ni nada, o que no seas capaz de apuntar con precisión, pero son contadísimos (e incluso puede que no te pase) pero claro, no podemos hablar de una "jugabilidad original" porque lo que hace no es más que extrapolar lo que ya se había visto en otros juegos como Smash T.V a las tres dimensiones.

La otra aportación al genero de los shooters en tercera persona, lo de pasarlos a las tres dimensiones, aunque en aquellos lejanos días no estaba tan extendido, tampoco es una cosa demasiado original. Contra ya había pasado su conversión al ancho alto y profundo dos años antes en el Contra: Legacy of War así que tampooco es que este juego fuese revolucionario en cuanto a eso.

Por lo que sí podemos acordarnos del juego es porque  "es el juego que protagonizó Bruce Willis". Porque, seamos sinceros, ese es el único reclamo que tiene ahora mismo, el único motivo para ponerlo en vuestra vieja consola (o en vuestro emulador) es que "tu personaje es Bruce Willis" y eso mola mil. Que eso sea lo más memorable no quiere decir que sea malo ¿eh? no estoy diciendo eso, es divertido, es uno de esos juegos locos en los que todo explota y matas a cien enemigos por minuto y eso, seamos sinceros, siempre ha molado. Hay una buena selección de armas y aunque los enemigos no varían demasiado los jefes finales molan. Pero por más divertido que pueda ser hay cien mejores que este, y el único motivo para probarlo (si no sois cómo yo, que lo jugó de pequeño y le tiene cariño) es porque aparece John McClane. Además, no hay muchos juegos en los que el monstruo final sea el presidente de los Estados Unidos.

Como nota más nerd, decir que este juego es el primero en el que Neversoft (es su segundo juego, tienen un plataformas en 2D antes) utilizó el motor del que sería su gran hit al año siguiente, Tony Hawk's Pro Skater.

jueves, 18 de abril de 2013

T.V: Firefly (2002)

"...You can't take the sky from me."

Si hablamos de series, cómo si hablamos de películas, hay que diferenciar (creo) entre series menores y series mayores. Las menores son aquellas series que pueden ofrecerte más o menos calidad, que pueden tener las miras más o menos altas, pero que su función principal es ser productos de consumo rápido accesibles para todo el mundo (lo que, cómo parecen empeñados en decir los defensores del "cumple con su función de entretener" no justifica ni de lejos la mediocridad). Las mayores son las series que exigen algo más al espectador y que prometen cierto enriquecimiento (que las series menores no están obligadas a ofrecer) si uno decide entrar en su juego. The Wire, por ejemplo, es una serie mayor. No solo te plantea dilemas morales en los que pensarás durante días si no que su ritmo pausado te obliga a estar atento todo el rato (lo que no quiere decir que sea aburrida, simplemente que te pide un mínimo de atención por tu parte). Sherlock sería el opuesto, una serie menor, casi procedimental, sobre un Sherlock Holmes moderno, que no te exige nada y te da muchísimo.

Por supuesto no se le puede exigir lo mismo a una serie mayor que a una menor. A ambas se les puede exigir un mínimo (que sean divertidas supongo) pero si una serie quiere jugar en las ligas mayores tiene que ofrecer mucho más a cambio.

Partiendo de esa manera de clasificar las series, que puede pareceros o no una chorrada, pero que como es mi blog y hago lo que me da la gana es probable que use más de una vez, Firefly, cómo Sherlock, diría que es uno de los mejores exponentes de "serie menor". Está lejos de poder competir con The Wire o Breaking Bad, pero demuestra que el entretenimiento no tiene porque estar reñido con la calidad, que ser endiabladamente divertida no es una excusa para ser mediocre. Firefly no es mediocre. No aspira a ser mediocre. Y sus catorce únicos capítulos son TELEVISIÓN con mayúsculas.

Hablar de esta serie es hablar de una de las cancelaciones más sonadas de la historia de la televisión. La serie creada por Josh Wheddon (director de Los Vengadores, antes conocido cómo creador de Buffy Cazavampiros y su spinoff Angel -además de algún que otro cómic) nació maldita. Fox, la cadena que la emitía, pensó que su piloto era demasiado serio y empezó a emitirla a partir del segundo episodio y los problemas (episodios emitidos en desorden y sin respetar absolutamente nada) perduraron hasta que la cadena canceló la serie sin emitir siquiera varios capítulos. Justo cuando la serie (cómo programa, dudo que en audiencia) empezaba a crecer y cuando empezaba a mostrar de lo que era capaz, la cadena que todavía mantiene Los Simpson en antena decidió que no merecía una segunda oportunidad. Por suerte los fans pensaban diferente y después de muchas presiones Universal terminó dando dinero a Wheddon para que diese un "final" a su historia en la película Serenity. Pero eso es otra historia.

Porque hoy hablamos de Firefly, el western del espacio.

Ambientada en el año 2517 Firefly presenta un universo en el que la humanidad sobrepobló el planeta tierra y tuvo que huir a una galaxia muy lejana llena de planetas y lunas que terraformar. "La Alianza" (no terminan de explicarlo nunca que yo sepa pero es una especie de colectivo de las naciones humanas principalmente formado -o esa pinta tiene por la bandera- por EEUU y China) decidió entonces unificar los planetas, lo que derivó en una guerra civil contra los independentistas. Mal Reynolds (Nathan Fillion, A.K.A Castle) luchó en esa guerra en el bando de los independentistas, perdió y ahora recorre el universo cómo hombre libre haciendo pequeños trabajos de contrabando (y otras cosas) en su nave, modelo Firefly, de nombre Serenity. La serie arranca cuando se unen a la tripulación dos fugitivos, un doctor y su hermana, que son los que darán una "trama" general a una serie que más allá de eso no es más que un procedimental de aventuras espaciales al más puro estilo Stargate (pero... en bueno).

Sí, ya se que esta premisa, por más atractivo que pueda sonar la combinación de la conquista del oeste con el espacio y la cultura asiática, no suena muy bien, que al final suena a serie friki, rollo, por qué no, STARGATE (puta mierda Stargate) y en cierto modo no es mucho más que eso, pero es eso hecho bien. Es eso hecho con mejores guiones y mejores personajes y unos actores que tienen una química que no se ve normalmente en repartos tan corales. Firefly tiene la química de Friends, y para cuando uno termina de ver sus catorce capítulos las ganas de seguir viendo la serie no vienen tanto por "resolver los misterios" si no porque te has encariñado con esos personajes. Porque podrías seguir viendo a Mal, Jayne, Zoë, Wash, Inara, Kaylee, Book, Simon y River durante años. Eres un miembro más de la Serenity y quieres seguir viajando con ellos por ese universo que, al menos aparentemente, tiene tantas cosas que ofrecer.

Creo que por eso dolió (y aún duele) tanto su cancelación. No es solo un fenómeno de culto entre los nerds del mundo por ser una de esas series que terminaron de forma prematura (aunque estoy bastante seguro que el 9 que tiene en IMDB está directamente relacionado con eso), lo es también porque conseguía combinar un universo atractivo, con infinitas posibilidades, un misterio interesante (¿Quien es River y que ha hecho la Alianza con ella?) y unos personajes con carisma. Y eso no se ve mucho.

Si habéis acabado con vuestras series y Juego de Tronos una vez a la semana os sabe a poco os recomiendo encarecidamente Firefly. Porque son catorce capítulos, todos divertidos, y merece que se le eche un vistazo. Aunque de tanta rabia al final.



(de la peli -y su final de no-pero-sí - hablaré en otro momento)

martes, 9 de abril de 2013

Música: Outrun (2013)

"The year was 1986. He was a teenager like any other, dreaming of his heroes and in love with a girl. But on a thunderous night along a ragged coast a misteryous red car came to him. It's power, lighting his eyes, blood-red."
Así abre el primer LP del archiconocido productor Kavinsky (Kavinsky es el alías de Vincent Belorgey) después de una carrera de siete años, metiéndote en situación. Ya no es el año 2013, ahora son los ochenta, es una noche de tormenta, hay un superdeportivo rojo y se huele el peligro. Y vaya si funciona.

Outrun, como todo lo que lleva haciendo Kavinsky hasta ahora suena a tíos duros, coches y neón. Mucho neón. Y como casi todo lo que lleva haciendo hasta ahora, funciona de puta madre. Vale que muchas de las canciones no son nuevas y que las viejas están requetegastadas en algunos casos (siendo el más exagerado el de Nightcall, que sigue siendo un temazo de cojones, es verdad, pero no por eso ha sido menos escuchado), pero eso no quita para que las nuevas no molen mazo. Además se permite samplear un tema de Dragon Ball, y eso me gana un poquito.

Al igual que mucha parte (no voy a decir toda porque realmente no conozco TODA) de la electrónica que viene del país galo bebe mucho de Daft Punk (sí amigos, seguimos hablando de herederos de Daft Punk en pleno 2013, ojala un día dejemos de hacerlo), pero aunque pueda no ser lo más original del planeta sí funciona, cuando le da por funcionar, cómo un jodido reloj. Canciones como Blizzard, Odd Look, Suburbia (la más diferente del disco) o Roadgame funcionan muy bien, Nightcall y Testarossa Autodrive siguen siendo unos temazos de cojones y incluso el sampleo de la canción de Dragon Ball de Rampage funciona bien.

En general es un disco de electrónica muy frances y muy ochentero. Lo esperable de Kavinsky. No decepciona pero tampoco sorprende, no es del montón pero tampoco es una obra maestra. El debut de Vincent Belorgey en el largo es un notable alto, una buena primera parte que deja con ganas de secuela.





Off Topic: Hace una semana o dos se confirmó que Daft Punk por fin va a sacar disco. GANAZAS

lunes, 8 de abril de 2013

Cine: Bronson (2008)


Charles Bronson era un actor conocido por su cara de palo, su pelo de cartón piedra, y por protagonizar grandes clásicos del cine de tíos duros de los 70 cómo El Justiciero De La Ciudad. Pero Charles Bronson es, además, el alias de Michael Gordon Peterson, probablemente el prisionero más famoso de inglaterra, tan famoso que en 2008 Nicolas Winding Refn (conocido director danés de películas como Drive o la trilogía Pusher -de la que hablaré en cuanto me anime a ver la tercera parte) pensó que sería una buena idea hacer una película sobre él. Y vaya si lo fue.

Protagonizada por Tom Hardy, Bronson sigue la vida del homónimo preso (no se hasta que punto es fiel a la historia real) tanto en su primer confinamiento, durante su corta vida cómo boxeador callejero y su vuelta a prisión, ya bajo su pseudónimo de luchador Charles Bronson. Cómo Drive está lejos de ser una película convencional, y aunque más "artística" que esta, Bronson intenta mantener el equilibrio entre el cine cultureta y el cine comercial con relativo éxito.

Hardy, que hace el papel de su vida, contribuye bastante a ese éxito, su Charles Bronson es un desquiciado hijo de puta que parece a punto de estallar en cada minuto que aparece en pantalla, y cuando lo hace no puede ser más divertido. Su ultraviolencia recuerda mucho a La Naranja Mecánica y aunque la historia no de mucho de si, como en aquella, son el carisma y la presencia del protagonista lo que mantiene el interés durante los noventa minutos que dura. Eso sin contar con todas las escenas que son canela de la más fina, cómo la etapa con los "looneys" (en especial la discusión con la doctora) y la escena final.

Una película acojonante en casi todos los sentidos. Divertidisima y muy muy recomendable. De las mejores que he visto últimamente.

Videojuegos: Las secuelas de Final Fight

Si hay un género (aparte de las plataformas) que lo petó durante la generación de los 16 bits, ese fue el Beat'Em'Up, y si hay un juego que marcó un referente sobre cómo hacer las cosas en esa categoría (en ese momento) fue el Final Fight. El juego de 1989 de Capcom lo petó en los salones recreativos y tuvo cien millones de conversiones a todo tipo de plataforma. Aún a día de hoy sus personajes son iconos que la compañía japonesa sigue reciclando para sus diferentes sagas (especialmente en Street Fighter, franquicia de la que siempre ha ido de la mano), y, cómo los grandes clásicos, el original sigue reciclándose en las nuevas consolas, siendo la última versión la de 360.

Pero hoy no toca hablar de Final Fight, si no que toca hablar de sus mucho menos conocidas secuelas en Super Nintendo; Final Fight 2 y Final Fight 3. Un juego que es, simple y llanamente, una basura, y otro que por algún motivo está en el más absoluto de los olvidos cuando no solo es tremendamente rescatable si no que supone una de las mejores muestras de su genero.

Tú, tú, pon a Haggar en la portada, que no se confunda nadie
El primero, por supuesto, es la mierda. Final Fight 2 salió cómo exclusiva para la Snes en 1993 y es, simple y llanamente, caca. Es más si no llevase el título de Final Fight probablemente nadie se molestaría nunca en hablar de ello. Da la sensación cuando uno lo juega, viendo la historia y lo poco que tiene en común con el original (no más que cualquier otra copia barata del FF1 de esas que salían a patadas en aquella época), que en realidad ni siquiera estaba pensado cómo secuela. Parece que alguien programó esta basura y directivo de Capcom, oliéndose el fracaso comercial que iba a suponer, propuso que metiesen a Haggar, Andore y una secuencia inicial que intenta de forma muy gratuita y barata conectarlo con el original (con el enorme argumento de "ESO NO IMPORTA" -true story, jugad al puto juego- para justificar el regreso de Mad Gear y su paso de banda callejera a sindicato del crimen internacional), le cambió el nombre y lo sacó al mercado.

Porque en serio, esto no tiene ninguna razón de ser. No es solo que no mejore nada con respecto al original (podría pasar como un mod del primer juego) si no que es diez veces más aburrido que el Final Fight 1. Los personajes nuevos son la suprema muestra de la falta de originalidad, Maki (que luego Capcom reciclaría en otros juegos) es uno de los diseños más gratuitos y simplones que he visto, y el ninja sudamericano CARLOS MIYAMOTO (juro por dios que se llama así y es un ninja sudamericano) que viene a sustituir cómo "el guay" (todos los Beat'Em'Ups tienen un guay) a Cody, es un tio que lleva una espada PERO NO LA USA, y no se puede ser más poser que un tío que lleva una espada atada a la espalda solo por fardar. Eso sin contar con que el juego, que ahora en lugar de situarse en Metro City se sitúa alrededor del mundo, presentando la versión más racista de Holanda jamás realizada. Nos reíamos de la visión que tenían los americanos de los vascos en MacGyver, pero la visión japonesa del campo Holandés es la polla.

Holanda todavía intenta recuperarse del apocalipsis nuclear
Haggar sigue, sí, y mola (porque no se puede molar mucho más que Haggar), pero es un aliciente demasiado pequeño para considerar este juego cómo algo más que una anécdota. Una secuela basura al nivel de otras secuelas basura cómo el Devil May Cry 2 o cualquier Call of Duty nuevo.

Por suerte Capcom quiso seguir apostando por la franquicia y dos años después de publicar esa basura sacó al mercado el que, ya sí, era la secuela que un juego histórico como el Final Fight merecía.

Es que hasta la portada mola mil
El Final Fight 3 coge la formula del primero y la mejora a todos los niveles. Para empezar, la acción vuelve a Metro City y se recupera como personaje jugable a Guy. Claro que falta Cody pero su hueco es llenado por dos nuevos personajes, Lucia (una policía macizorra y karateka) y Dean (el "guay" de este juego), un ex-pandillero con poderes eléctricos que busca venganza por la muerte de su familia (que es cómo un millón de veces más guay que ser un ninja sudamericano que lleva una espada que no usa y que se une a Haggar PORQUE SÍ). A eso hay que añadirle una jugabilidad aumentada y mejorada, con el añadido de combos, técnicas especiales al estilo Street Fighter y una barra para demoledores ultracombos. El recorrido de los niveles deja de ser lineal (o al menos no lo es tanto) con diferentes caminos a tomar, lo que da cierta versatilidad al juego y lo hace más re-jugable, además de mejorar el aspecto gráfico y rediseñar por completo todo el juego, siendo el único que sale perdiendo con el cambio Haggar, que tiene uno de los peores re-diseños de la historia de los videojuegos.
La gente se quejaba del nuevo Dante porque no tenía pelo blanco. Esto es destruir un personaje
Final Fight 3 es el modo correcto de hacer una secuela, mejorando a todos los niveles el original, y es uno de los mejores Beat'Em'Ups a los que he tenido el gusto de jugar. El que haya caído en semejante olvido y no este a la altura, no ya de la primera parte de la serie, si no de otros enormes del género como el Turtles in Time es algo que no puedo entender.

Y después de aquello la franquicia se apagó. Supongo que la poca fama de esa tercera parte (y que todavía se seguía hablando mucho del primero) contribuyó a eso, a Capcom le iba bien reciclando el viejo juego en todos los soportes posibles y a sus personajes en todos los juegos de la compañía que podían. Tuvieron que pasar cuatro años hasta que la compañía japonesa se decidiese a hacer algo con el nombre en forma de un juego de lucha lamentable llamado Final Fight: Revenge, que supuso además el regreso de la franquicia a los arcades. Sin embargo la baja calidad del título (y supongo que el que los arcades ya no eran lo que habían sido) medio cerró cualquier otro Final Fight hasta el año 2005 en donde se publicó Final Fight: Streetwise, un Beat'Em'Up tridimensional terrible que sin ser tan avergonzantemente malo cómo el segundo si es de una mediocridad supina.

Pero por mucho que la líen en capcom mancillando el nombre de la franquicia no se puede joder el pasado, y al final siempre nos quedará el primer juego, o esa joyita secreta de la Snes en forma de tercera parte.

viernes, 5 de abril de 2013

MÚSICA: Wreckroom Records

Adrian Grenier es conocido principalmente por interpretar a Vincent Chase durante ocho años en la serie Entourage. Lo que se conoce menos es su faceta de músico, que empieza con su banda Caldwell y termina en su propia discográfica/canal de YouTube/cosa llamada Wreckroom Records y que es lo que de verdad me importa ahora y el motivo por el que la siguiente entrada no ha ido de un videojuego si no que va de esta mierda.

El rollo es que Adrian, que es un tipo cojonudo aparentemente, empezó hace cosa de un año con el proyecto Wreckroom Records que consiste en que básicamente coge bandas por ahí y les da la oportunidad de grabar un tema en su sótano. El corre con los gastos. No son vídeos en directo, son en falso-directo o algo así (a veces les añaden movidas y tal) pero sirven para promocionar a bandas que, de otra manera, tendrían una proyección mucho más pequeña.

Vamos, lo que se conoce vulgarmente cómo "Una idea cojonuda".

Pasaros por su canal de YouTube, y mirar algún vídeo, hay gente muy buena (Y sorprendentemente joven, The Skins, por ejemplo, lo parten mil y el batería tiene 13 años), yo os dejo aquí uno de los que más me ha gustado:


(este grupo, por ejemplo, son tres hermanos de 15, 17 y 19 años)

TOP 10: Películas teen.

Sigo sin querer mojarme así que en lugar de hacer una crítica voy a hacer un ranking. Se llevan mejor este tipo de cosas, creo. En este caso voy a hacer una lista sobre películas protagonizadas por adolescentes. El rollo es que soy muy fan de este tipo d ehistorias, desde siempre lo he sido. Para mi además, aunque no sea un género per se, es cómo la ciencia ficción o el western, donde, por ejemplo en la ciencia ficción, se puede abarcar desde películas de acción cómo "Desafío Total" a comedias románticas cómo "Extraterrestre" o dramas cómo "Another Earth".

En este caso con las películas protagonizadas por adolescentes (aunque sea algo demasiado ambiguo para ser considerado un género) pasa un poco lo mismo. Se tiende a pensar que este tipo de cintas se reducen a los clásicos tópicos, al baile, la perdida de la virginidad y todas esas mierdas, cuando en realidad hay Cintas de todo tipo acerca del tema. Pero bueno, esta es mi lista de diez películas protagonizadas por adolescentes, he intentado abarcar todo y lo único que he tenido en cuenta es que los protagonistas estén en etapa de estar en el instituto (y vayan a uno). Lo aviso porque la primera está particularmente cogida por los pelos (si estamos considerando a las pelis de instituto cómo un género en si mismo, sea correcto o no):

10-It's kind of a funny story (2010):
Hasta este año no había visto esta película y es ya una de mis favoritas (y no me refiero solo en cuanto a este tipo de cintas). Si está tan bajo en la lista no es porque el resto me gusten más (de hecho puede que solo dos o tres de la lista me parezcan mejores que esta) si no porque creo que dentro de lo que se supone que es esta lista, esto no es ni por asomo una buena representación. La película... sí, va sobre un adolescente y tal... pero practicamente toda la película ocurre en un hospital psiquiátrico. Hay amor y los problemas del tipo vienen en gran medida derivados de la edad que tiene y eso, pero no es la clásica "peli de instituto" ni mucho menos. De las de más hay muchas que tampoco lo son, pero esta es la que menos sin duda.

09-Brick (2005):
Brick es otra de esas películas raras. En este caso si habla sobre adolescentes y sobre institutos y toda la movida, pero es un thriller. Es una película pulp, con un detective privado, una femme fatale, una muerta y un crimen por resolver... pero ambientado en un instituto, lo que, lejos de joder la experiencia enriquece bastante la película. Además es la opera prima de Rian Johnson (director de esa acojonante película llamada Looper y de varios episodios de Breaking Bad) y su primera colaboración con Joseph Gordon Levitt, antes de que fuese Joseph Gordon Levitt, cuando solo era "Ese chaval que salía en aquella serie de los marcianos" o "El bajito de 10 razones para odiarte". En general es original, muy muy divertida y merece mucho, muchísimo la pena.

08-La Ola (2008):
Me estoy dando cuenta según escribo que la mitad de las películas que voy a poner aquí son películas del S.XXI, con lo que puede que os penséis muchos que soy un gilipollas o que no tengo ni idea porque solo hablo de películas recientes (podría ser, yo que sé, igual sois de esos snobs) en lugar de hablar de la que se considera cómo "la edad dorada de las pelis de instituto", los 80, y hay alguna de esa década, pero cuando llegue os explicaré porque no las he incluido, y porque en realidad no he incluido practicamente nada fuera de este siglo. Pero bueno, La Ola ¿Qué se puede decir de esta película? Cómo las otras no es la clásica película sobre adolescentes, es más un drama pseudo-político sobre los peligros de pertenecer al grupo. Es una de esas películas que en cosa de cinco años se ha convertido en un "la ha visto todo el mundo" y en una de esas pelis que probablemente pongan en los institutos, y no me sorprende. Aunque algo infantil y simplificado el mensaje es muy potente y los actores representan bastante bien todos los estereotipos de una clase, desde el raro hasta el popular, todo lo que puedas encontrar en una clase (que en el fondo no deja de ser un poco un reflejo de la sociedad) está representado. La Ola mola. Y da un poco de miedo también.

07-Napoleon Dynamite (2004):
Me vais a matar, o vais a pensar que soy gilipollas o algo. No por incluir esta película, si no porque de cuatro que vamos son cuatro de este siglo (y me vais a matar más cuando quite una que debería estar en esta lista, ya veréis). Napoleon Dynamite... no es una película para todo el mundo, pero tampoco sabría deciros "para quien es esta película" ni os privaría de verla. Es, creo, la más diferente de las que hay en esta lista. Su humor es raro, sus personajes son raros y sus situaciones son aún más raras. No termina de dejar claro si está ambientada en el presente o en los 80 y muchas veces no sabes si te tenías que reír o solo sentirte muy muy incomodo. Es de esas películas. Y la amo. La escena del baile es épica. El hermano y el tío son la polla y Pedro, Pedro es el mejor secundario de la historia. Muchos la odiareis y no le veréis la gracia, pero aún así creo que merece la pena que la veáis.

06-Crueles Intenciones (1999):
TOMA GUILTY PLEASURE. Esta película es, a todos los efectos, malísima, si se ha colado aquí es porque es una de esas película horrorosas que amo con locura, una de esas pelis que me da vergüenza reconocer que me gustan. La reconversión de Las Amistades Peligrosas en pseudo drama adolescente deriva en una película con momentos avergonzantes propios de basurilla cómo Gossip Girl (de hecho estoy bastante seguro que el malo medio gay -pero que luego se suponía que era un fucker- de esta está basado en esta película). ¿Por qué está en mi lista? Y sobre todo ¿Por qué está TAN ALTO? (ha estado a punto de entrar en el top 5), porque desde que la vi me encantó. Porque es mala, predecible, falsa y en general bastante involuntariamente cómica. Es uno de los peores exponentes de este tipo de cintas (si estamos englobando todo en un pseudo-género) y eso la hace todavía más genial. Uno de mis placeres más culpables sin lugar a dudas.

05-Juno (2007):
Juno, cómo la décima (y la primera) de esta lista, es una de esas películas que no solo entraría en este ranking si no que probablemente se haría un hueco en mis diez películas favoritas de todos los tiempos. No voy a decir mucho más de ella porque tampoco se si hay mucho más que decir. Ellen Page se sale, los diálogos se salen, la banda sonora mola... y tiene tanto buen rollo y deja tan buen sabor de boca que convertiría el peor de los días en algo bueno. Y eso es mucho más que suficiente para considerar una película buena. Sí solo es el número cinco es porque, cómo el 10, no es propiamente una película de instituto o al menos lo es menos que las cuatro que quedan.

04-American Pie (1999):
American Pie es el Porky's de mi generación. Creo que toda la gente de mi edad y hasta dos años o tres más mayor ha soñado con las tetas de Shannon Elizabeth después de esta película. Sus personajes son míticos, sus escenas épicas y sí, no deja de ser una chorrada como un piano, pero es una de las mejores "chorradas como pianos" de la historia. Como comedia guarra me parece que ninguna representa mejor todos los tópicos del género. Y sí, en realidad no deja de ser una mierda, pero es una mierda mítica y legendaria, una peli que hemos disfrutado practicamente todos y que probablemente para muchos fuese nuestro primer contacto con este tipo de cintas y con todos sus tópicos (el baile, la perdida de la virginidad, el duro fucker que se vuelve un moñas por la chica, las tetas, etc...).

03-Supersalidos (2007):
Supersalidos es una de esas películas que no me cansaré de recomendar. Me parece una de las mejores comedias de los últimos años, con situaciones que son la polla y personajes que son todavía mejores. Todas las escenas en las que sale McLovin son el descojono y Michael Cera y Jonah Hill están a otro nivel. Es un parto de culo constante. Se tiende a pensar por el título que va a ser "otra American Pie" pero es bastante más que eso, la verdad. Si esta entre las películas de esta lista que no habéis visto es, de lejos, la primera que deberíais ver. Yo me lleve un sorpresón de la ostia cuando la vi. Eso sí, verla en inglés porque el doblaje al castellano es bastante puta mierda.

02-El club de los cinco (1985):
Sí, sí, El club de los cinco no solo ha tardado en aparecer si no que encima es SOLO el segundo puesto de mi lista cuando lo normal sería que coronase todas las listas sobre pelis de instituto, ya se que es indignante y eso, pero ¿sabéis qué? iros a tomar por culo. Es mi lista. Y aunque creo que esta película es de lejos la mejor y más importante aportación al tema "teen" de la historia, no corona mi lista porque, oh, sorpresa, no es mi película favorita. A ver, entendedme, es una película acojonante, una película que debería ser de visionado obligado en institutos y una de las más intemporales representaciones de la adolescencia. Sí, le puedes achacar que, cómo todas las películas de esa década, es blandita e ingenua, pero los problemas que presenta en realidad siguen existiendo (o son muy muy parecidos). La escena en la que los personajes se sinceran, que es lo mejor de toda la puta película, sigue siendo épica, el momento de "entonces es que somos mejores personas que vosotros" es genial a muchísimos niveles. De verdad, no le quito ningún merito a John Hughes por esta película, no se ha hecho nada igual y no se si se volverá a hacer nada parecido, sin embargo, si tengo que ser objetivo, en mi lista solo puede alcanzar el segundo puesto.

01-Todo en un día (1986):
Está claro que el maestro de las pelis de instituto solo puede ser superado por otra película suya, en este caso la algo menos conocida, algo más ligera, y por regla general considerada cómo algo menor, "Ferris Bueller's day off" o como se tradujo al castellano "Todo en un día". Lejos de la seriedad y el respeto que El club de los cinco dio a estas pelis, Todo en un día da esa ligereza y esa trivialidad que me parece tan importante en el cine. Porque ante todo el cine tiene que ser divertido, y no se me ocurre ninguna película más divertida que esta. Aparte, no es como si John Hughes se olvidase de todo lo que había hablado en su anterior película, el personaje de Cameron representa en cierto modo a todos los adolescentes del mundo y al público en general, del mismo modo que los cinco de Breakfast Club lo hacían. Es un cobarde que teme enfrentarse a su padre y que no sabe que va a ser de él, Ferris tampoco es que lo sepa, pero es un tipo guay y seguro de si mismo (Cameron es el público y Ferris es lo que al público le gustaría ser). La diferencia está en que, mientras la anterior no daba ninguna respuesta clara acerca del problema de no saber que hacer con tu vida y como afrontarlo o superarlo, esta si lo hace. En el fondo Ferris pasa el día con Cameron intentando que comprenda su "credo", intentando que aprenda que "La vida pasa muy deprisa, si no te paras y miras a tu alrededor... te la podrías perder". Y ese mensaje no solo me parece valido en esa etapa si no en cualquiera. Todo en un día, si no la habéis visto ya, no deberíais tardar, con suerte hasta la pilláis en Paramount Channel un día (la dan una vez cada mes o así).

Y hasta aquí mi primer ranking, mi primer post y mi primer algo en este blog nuevo. Pero antes de terminar quiero dejar claro algo que he dicho más arriba que iba a aclarar pero no he hecho al final, la poca inclusión de películas de la llamada "época dorada" de las pelis de instituto en esta lista. Sí, es verdad que al final la lista la coronan dos pelis de John Hughes (sus dos más míticas además) pero todas las de más se acercan más a este siglo que otra cosa. Esto es porque, por mucho que pueda ver el atractivo en las películas ochenteras, si somos un poco objetivos, en realidad todas esas comedias eran tremendamente ingenuas y bobas. Sí, ya se que hay muchos por ahí que seguro que tienen muchísimo aprecio a pelis cómo "16 velas" o "Un gran amor". O incluso "Porky's". Pero para mi todas esas películas son bastante mierda. O son ultra-moñas o son muy blanditas. Aparte, creo que si hablamos de este tipo de cintas aquellas que aparecieron en la época en la que uno vivió esa edad (para mi los primeros años de este siglo) son las que mejor le representan

La única que probablemente debería haber metido (y sé que a la larga me voy a arrepentir de no haber metido) es Regreso al Futuro.






(mañana toca videojuegos, creo)

jueves, 4 de abril de 2013

Botella rota.

La cosa es que tengo que empezar esto de alguna manera, tengo que hacer una primera entrada, una inauguración y toda la movida. Me he currado una cabecera (creo que ha quedado bien ¿No?, quiero decir, no es la idea más original del planeta ni nada, pero no es cómo si el resto de cosas de este blog lo fuesen ni nada...) así que ya, sí que sí, tengo que publicar algo.

El problema es sobre qué, y sobre todo, como. Porque al final un primer post es muy definitorio, no definitivo pero es un indicativo de por donde van a ir los tiros. Si lo leéis y no os gusta os vais y no volvéis más. El qué es importante también, más secundario que el como pero importante también. Porque ¿De que hablo? ¿Hablo de alguna frikada de la ostia y no volvéis nunca? ¿Hablo de algo absolutamente indie y cool y no volvéis nunca? o tiro de lo típico, de eso que podéis leer en otras mil millones de páginas y ya lo dejo todo al duro azar de que estéis o no de acuerdo conmigo? (seamos sinceros, si pongo a parir algo que os mola no vais a volver y lo sabéis)

Así que cómo esto me deja en una situación en la que no gano de ninguna de las maneras creo que lo mejor es publicar esta entrada tal cual está, dar por inaugurado el blog y a tomar por culo. Ya mañana empezamos con la mierda de verdad.