martes, 7 de mayo de 2013

CINE: David Bowie me arruinó las ventajas de ser un marginado.

Esta entrada es pura mierda, pero viendo que me he medio enzarzado en una medio discusión (las he tenido peores) en YouTube a costa del tema me apetece hablar de ello por aquí.

El tema es que este año se estrenó (diría que fue este año, puede que a finales del pasado) la película "Las ventajas de ser un marginado", "The perks of being a Wallflower" en inglés. Es una película en la que Percy Jackson hace un papelón cómo el típico chaval inadaptado, listo y escritor del noventa por cien de las películas indies. Después de un mal año el chaval vuelve al instituto y se hace amigo de Emma Watson (que es tan adorable en esta película que no puedes evitar sentir la necesidad de matarla a patadas) y su hermano gay (que es tan gay y tan majo que, de nuevo, solo quieres matarlo a patadas). Lo que sigue son un montón de cosas que no tienen mucho que ver con el tema, y aunque no es la mejor película del mundo (si quereis ver algo parecido pero... bueno... mejor, poneros la primera de mi Top 10 de pelis de instituto "It's Kind of a Funny Story"... o "Juno", poneros Juno, qué cojones) está bien. Percy Jackson se sale la verdad y la peli está simpática y aunque el giro final es un poco "WTF DE DONDE COÑO HA SALIDO ESO" esta guay.

El caso es que los personajes de esta película son unos marginados. Son unos intelectuales de mierda y unos raros. Interpretan Rocky Horror Picture Show en un teatro, se regalan maquinas de escribir y Emma Watson no deja de repetir lo muchísimo muchísimo muchísimo que ama la música (y tu quieres matarla a patadas). El caso es que hay una escena en la que van en un coche y cruzan un túnel. Es una de las escenas más importantes de la película. En la radio empieza a sonar Heroes de David Bowie, ellos no conocen la canción y descubrir que canción es Heroes de David Bowie se convierte en una subtrama de la película. A ver, repito, unos proto-hipsters que representan Rocky Horror Picture Show en un teatro y que dicen frases como "La música solo hay que escucharla en vinilo" (o algo así) no conocen Heroes de David Bowie.

No sé, igual es que yo soy muy tiquismiquis, pero a mi eso me jodió la película entera. No es que automaticamente me pareciese una mierda, que tampoco es eso, pero cada vez que aparecía el tema de la canción del túnel (aparece como tres veces en la película) era como recordarme que estaba viendo una película, que esa gente no existía de verdad y que solo eran actores haciendo el cretino. Se supone que suena Heroes (aparentemente en el libro es Landslide de Fleetwood Mac -una canción que no había escuchado y que, la verdad, funciona casi igual de bien y es infinitamente menos conocida) porque funciona de puta madre con la escena, y es verdad, pero no puedes pretender venderme la moto que esa puta gente no sabe quien es David Bowie ni cual es una de sus canciones más importantes. Porque esa es la movida, que no es una canción que me guste, que haya sido muy importante en mi vida, pero que en realidad no la conoce tanta gente. Es que estamos hablando de Heroes de David Bowie. David Bowie tiene Space Oddity y esta.

Y ahí es donde me surge la duda ¿Estoy exagerando? ¿Debo pasar la verosimilitud del relato por el momento películero? Y no sé... puede que sea culpa mía, que le doy demasiadas vueltas... pero la verdad, me jode. Es sacrificar la coherencia por el efecto, que es básicamente lo que se hace ahora con todas las películas. El momento es perfecto, pero inverosímil. Y si estás contando una historia deberías controlar la inverosimilitud de tu relato, porque son esas incoherencias las que van a sacarnos de la película. Es que joder ¡Qué la otra canción no desentonaba tanto! ¿Qué necesidad tenías de cambiarla?

En fin... os dejo la canción del libro (es lo que dicen por YouTube, no se si es, no me he leído el libro). Mañana ya empiezo otra vez regular con cosas más serias que esta mierda de entrada, tranquilos (puede haber cómic mañana, veremos):

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